El pasado mes de junio, la Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó un proyecto de ley sobre asuntos agrícolas que prohibiría las peleas de gallos en Puerto Rico y en sus demás territorios. Durante esta semana, un comité de conferencia del Congreso llevará a votación final la propuesta, conocida como el «Agriculture Improvement Act of 2018» ().

Esta controversial legislación comenzaría su vigencia un año después de su prohibición

Tanto los delegados de Guam como de Puerto Rico han manifestado su oposición a la legislación por suponer esta medida una pérdida considerable al erario público. Por ejemplo, la Comisionada Residente de Puerto Rico en Washington D.C., Jenniffer González Colón, había indicado que la industria de las peleas de gallos en Puerto Rico representa una inyección económica de $18 millones anuales. También había indicado que cerca de 12,500 personas dependen de esa industria. Por otro lado, la delegada de Guam, Madeleine Bordallo, estaba en contra de extender la prohibición de las peleas de gallos a Guam debido a su importancia cultural. Según Bordallo, cualquier prohibición o regulación a esos fines, debe  promulgarse a nivel local.

El proyecto de consenso irá a votación en la Cámara baja y el Senado sin la posibilidad de ser enmendado. Los representantes y senadores federales deberán votar a favor o en contra del informe de conferencia.

Gobernador Rosselló Nevares estará en la capital federal y abogará para excluir a Puerto Rico de la prohibición contra la industria de gallos

El secretario de Asuntos Público y Política Pública, Ramón Rosario Cortés, expresó que el Gobierno de Puerto Rico «está en contra de cualquier iniciativa congresional para prohibir en la Isla la industria gallística, que es un pilar cultural y económico para los puertorriqueños». «El gobernador Ricardo Rosselló Nevares viajará a la capital federal y estará abogando para que no se penalice a Puerto Rico con esta medida que eliminaría una industria importante para nuestro desarrollo económico y cultural», manifestó el portavoz de La Fortaleza. El informe de conferencia anunciado y que se llevará a votación próximamente en el Congreso federal incluye una disposición para prohibir las peleas de gallos en los territorios de Estados Unidos, lo que incluiría a Puerto Rico. Esta prohibición es un pedido de la Cámara de Representantes federal en el proceso de negociación de la medida con el Senado federal, quien solicitó se pospusiera su aplicación un año. «El gobernador, la comisionada residente Jenniffer González, la Administración de Asuntos Federales de Puerto Rico en Washington y la Asamblea Legislativa local se han expresado en contra y han trabajado para evitar esta iniciativa que afectará una industria importante que hace grandes aportaciones a nuestra economía y genera miles de empleos. Además de su valor cultural, la industria gallística es la única fuente de sustento de miles de familias puertorriqueñas», concluyó Rosario Cortés.

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