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Por Daniel Rivera Vargas

Con una reciente decisión del equivalente al Tribunal Supremo de Francia como trasfondo, el caso que discute el destino de más de un centenar de obras del pintor de origen húngaro Victor Vasarely tendrá sus argumentaciones finales el próximo miércoles, 26 de junio en el Tribunal federal para el Distrito de Puerto Rico.

La abogada Isabel Abislaimán, quien posee una certificación como tasadora de arte, comentó en entrevista con Microjuris que la decisión que emita en este proceso la jueza federal Maria Antongiorgi Jordán podría dar paso a un proceso formal de confiscación de las piezas de arte y a la continuación de la acusación criminal contra Michèle Taburno Vasarely, la mujer que tenía más de un centenar de piezas del artista en su residencia en Viejo San Juan.

La nuera del artista enfrenta cargos por violar once artículos del Código Penal de Francia castigables con hasta siete años de prisión por cargos de «abuso de confianza» y «blanqueo de abuso de confianza» (Trustee Liability for Breach of Trust).

Cuando el arte cae en disputas legales

La residencia de la mujer en Viejo San Juan, el antiguo Colegio de Párvulos, fue allanada por el Negociado Federal de Investigaciones (FBI, en inglés) en abril de 2023 y se ocuparon más de un centenar de piezas de arte.

El allanamiento se produjo como parte de un tratado entre las autoridades estadounidenses y francesas por que hay una disputa legal en Francia sobre quién es el dueño de las obras de arte.

«Están incautadas provisionalmente, en custodia del AUSA (siglas en inglés de Assistant United States Attorney), fiscalía federal, en custodia bajo los términos de un tratado internacional», agregó Abislaimán.

En medio de ese proceso en Viejo San Juan, también fue acusada Taburno Vasarely por las autoridades francesas: «se le hizo la lectura aquí en Puerto Rico, abril 13 de 2023 se celebró una vista para lectura de cargos en Puerto Rico en la oficina del fiscal federal, donde un juez francés le leyó los cargos con los que fue formalmente acusada», recordó Abislaimán.

Un mes después, en mayo de 2023, mediante una moción bajo la regla penal federal 41 para recuperar propiedad incautada, Taburno Vasarely solicitó la devolución de las obras. Este es el asunto que la jueza federal está atendiendo en este momento, y cuyos argumentos finales se han pautado para el 26 de este mes, explicó Abislaimán.

«Ella (Taburno Vasarely) alega que Vaserely personalmente le regaló x número de obras hace mucho tiempo y ella no tiene récord de cuándo le dio estas cosas», explicó Abislaimán. «Ella quería plantear que no tiene otro remedio adecuado y que sufriría un daño irreparable si el arte se envía a Francia».

Meses más tarde, en febrero de 2024, Taburno Vasarely comenzó a testificar ante la jueza sobre su solicitud, pero expresó sentirse indispuesta de salud y el proceso no se completó. Abislaimán señaló que ese mismo día, el Tribunal de Casación de Francia, el equivalente al Tribunal Supremo de ese país europeo, emitió una importante decisión relacionada con el caso.

Según Abislaimán, el alto foro francés rechazó intervenir en una apelación llevada a cabo por Yann Streiss, un abogado que tuvo a su cargo parte del proceso hereditario relacionado a Vasarely.

Esto tuvo el efecto de mantener como el estado de derecho vigente una decisión adversa a Streiss, quien encabezó un proceso de arbitraje sobre las obras aparentemente ficticio, y que las autoridades francesas catalogaron de «simulacro».

«Ya (con la acción del Tribunal de Casación) es final y firme el proceso en Francia», indicó la letrada. «Cuando ella (Taburno-Vasarely) radicó la moción en mayo de 2023 lo que había en curso era una investigación».

Abislaimán, abogada estudiosa de asuntos de arte, revisó varios documentos relacionados al caso para esta entrevista y entiende que, con esta decisión, el próximo paso sería esperar la resolución de la jueza federal en Puerto Rico.

Si la jueza falla en contra de Taburno Vasarely, las obras actualmente bajo el control del FBI serían llevadas a Francia para su tasación y para determinar su destino final, mientras que el proceso criminal contra Taburno Vasarely podría continuar.

Abislaimán comentó que este pleito comenzó en 1995 cuando los herederos de Vasarely se percataron de que había obras desaparecidas. Taburno Vasarely era la directora de la fundación del artista y, como parte de un pleito de herencia, se celebró un proceso de arbitraje encabezado por el abogado Streiss.

El letrado, actualmente residente en Puerto Rico, a quien la mujer le pagó con 87 obras de arte del pintor de origen húngaro, fungió al mismo tiempo como abogado de la fundación y de los herederos, un conflicto de interés que le costó el desaforo.

Y hubo años de litigación. «Hubo tres decisiones en Francia disponiendo que los delitos no estaban prescritos. Ella decía que estaban prescritos, y en el 2014 se dejó sin efecto el arbitraje pero no se dispuso el tema de la titularidad de las obras», sostuvo.

Taburno Vasarely comenzó a cooperar con las autoridades federales en Puerto Rico cuando estas la contactaron e incluso la mujer preparó un listado de obras que estaban en su poder en el Viejo San Juan.

Abislaimán dijo que una vez los federales realizan el allanamiento del propio listado de Taburno Vasarely se identificaban unas 15 obras que el FBI no localizó en la casa de la mujer.

«Le incautaron la computadora, los celulares, y ahí encontraron que siete de esas obras ella las envió a Dubai (ciudad de Emiratos Árabes Unidos)", mencionó.

Abislaimán sostuvo que, aparte de los cargos en Francia, sus actos podrían llevarla a enfrentar cargos en el futuro en Puerto Rico y Estados Unidos.

Por ejemplo, afirmó que la mujer aparentemente trajo las obras a Puerto Rico sin declararlas al Negociado de Aduanas federal.