Por Daniel Rivera Vargas

El veredicto de culpabilidad emitido la semana pasada contra el expresidente Donald Trump abre la puerta a la incertidumbre, implica nuevas posibilidades tanto para demócratas como republicanos y conlleva repercusiones muy serias que van más allá de un ciclo electoral, según algunas personas entrevistadas por Microjuris.

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El profesor de derecho constitucional Carlos Ramos González reiteró que es indudable que la condena de Trump de la semana pasada, por 34 cargos en el estado de Nueva York por falsificación de documentos, no es un impedimento para que este aspire a la presidencia por tercera vez en ocho años.

La constitución federal solo exige como requisitos que el candidato sea nacido en Estados Unidos, que lleva 14 años de residente, y por lo menos 35 años de edad.

«Esa constitución no fue pensada necesariamente para una situación como esta», comentó Ramos González.

Agregó que tampoco hay forma de que los estados impidan a Trump postularse para las próximas elecciones. Esto se debe a la reciente decisión del Tribunal Supremo de Estados Unidos, que determinó que la cláusula que prohíbe a alguien aspirar a un cargo por cometer insurrección requiere acción del Congreso.

Con el veredicto de la semana pasada, Trump se convierte en el primer expresidente en ser hallado culpable de delitos graves. Sin embargo, no sería el primer candidato presidencial en correr con una condena en sus antecedentes. En 1917, el socialista E.V. Debs aspiró desde la cárcel a la presidencia y obtuvo un millón de votos.

«Claro, era un voto casi simbólico (no se gana la presidencia con un millón de votos), pero en esta ocasión hay una posibilidad real de que un convicto gane la presidencia», añadió.

Para el catedrático de la Facultad de Derecho de la Universidad Interamericana de Puerto Rico el veredicto condenatorio de Trump no fue una sorpresa porque las personas que estuvieron pendientes al proceso pudieron ver cómo el desfile de prueba era suficiente para saber que el expresidente no podía salir inocente de forma unánime, por lo que las opciones reales del jurado eran declararlo culpable o un jurado trancado por falta de unanimidad.

Tampoco hay ambiente social para una enmienda constitucional que impida la insólita situación de que el mando del país caiga en manos de un hombre en espera de una posible sentencia de cárcel tras un veredicto de un jurado.

«Tienes la mitad de la población que aparentemente no le importa. Estamos viendo el fracaso de la democracia participativa, la decadencia de la sociedad norteamericana, y una creciente desigualdad económica entre ricos y pobres. El discrimen racial contra hispanos e inmigrantes es muy fuerte. Hay electores que quieren vivir en una sociedad que no existe, en completa desinformación. En Estados Unidos se sufre el síndrome de persona maltratada. Frantz Fanon decía que al final la persona oprimida termina convirtiéndose en el opresor. Hay una mitad del electorado que proyecta su desgracia aceptando a este individuo, a este delincuente», sostuvo Ramos González sobre Trump.

La situación llega al punto de que Trump está usando el veredicto a su favor. «Él quiere que lo metan preso, porque él sabe que hasta preso puede ganar», mencionó.

«Esto tiene unas implicaciones, por supuesto, muy serias. La posibilidad de que él y su movimiento ganen, a pesar de que algunas personas pensaban que la condena le haría perder votos entre los independientes, sigue siendo alta porque su base es muy poderosa y está alineada».

«Pero la implicación que tiene para el futuro de la nación norteamericana, el mensaje que se envía, es obviamente aterrador para Estados Unidos, y para la ultraderecha del mundo que se ha aliado a eso. Si eso significa que la nación norteamericana va a terminar, que de esas cenizas deberá surgir algo bueno para Estados Unidos y el mundo, ya veremos», indicó.

«Lo segundo que quiero resaltar es la importancia que tiene para Puerto Rico», mencionó el catedrático. «Si Trump gana la presidencia, ya sabemos lo que piensa de la estadidad, él no cree en la estadidad para Puerto Rico, nos quiso vender a Groenlandia, que dice que somos un país sucio, todos los vejámenes que ha dicho», lamentó

Añadió que hay personas muy influyentes en Puerto Rico, de familias poderosas, que son seguidores de Trump, «pero no se atreven a decirlo abiertamente».

Indicó que sería importante que la comisionada residente y candidata a la gobernación en el 2024 por el Partido Nuevo Progresista (PNP), Jenniffer González, se exprese sobre el veredicto de Trump y aseguró que muchas personas detrás de su campaña son creyentes en el magnate y político estadounidense.

Ramos expresó que aunque Trump tiene otros tres juicios penales, dos federales y otro estatal, es improbable que ninguno de esos casos se vea antes de las elecciones.

El profesor recordó que Trump ha anticipado que, de ganar la presidencia ordenará, al Departamento de Justicia federal a desestimar los casos federales.

Mientras, el consultor en Washington DC, Federico de Jesús, recordó que este es el tercer fallo judicial adverso en contra de Trump, solo que los otros dos casos son de naturaleza civil.

Pero, el exportavoz hispano para el demócrata Barack Obama, reconoció que el resultado de este caso federal, al menos a los primeros días de emitirse el veredicto, es un fortalecimiento del candidato en sus oportunidades de recoger dinero.

«Le ha sacado el jugo», sostuvo de Jesús.

Para el Partido Demócrata es una oportunidad, no solo por la mancha de candidato Trump sino en contra del Partido Republicano, por que los pone como el primer partido en tener a un candidato convicto.

«El Partido Republicano se jacta de ser un partido de ley y orden, de ser pro policía, pero ahora ellos son los que defienden a un candidato que ha sido convicto, y un candidato que ha dicho que va a indultar y que son prisioneros políticos los que participaron en la insurrección del 6 de enero, aunque ahí murieron policías», sostuvo de Jesús.

También dijo el efecto en el sector conservador de este veredicto, en un caso asociado a una infidelidad de Trump con una actriz del mundo pornográfico en momentos en que estaba casado y su esposa estaba embarazada.

«Es una de esas contradicciones del movimiento conservador. Con Trump se ha levantado el velo de la hipocresía de la derecha religiosa estadounidense. Ya se sabía desde 2016 que Trump era un acosador sexual. El comportamiento personal de Donald Trump deja mucho que desear. El movimiento de derecha estadounidense lo que ha demostrado es que lo que le importa es el aborto, condenar los derechos LGBTTIQ... ese es el pacto que hicieron con el diablo al respaldar a Trump», denunció.

Aún es incierto el efecto para las elecciones del pasado veredicto, dijo de Jesús. Explicó que en medio del proceso primarista republicano, había estudios que indicaban que el 15% del electorado no saldría a votar por Trump si este era hallado culpable en alguno de sus juicios.

Para eso habrá que ver que sucede en los próximos meses, y como los demócratas deciden usar este veredicto condenatorio en la campaña.