El Tribunal Supremo de Estados Unidos escuchará el viernes los argumentos sobre si la administración de Joe Biden puede obligar a las empresas del sector privado a vacunar o someter a pruebas a decenas de millones de empleados y empleadas, informaron medios internacionales.

Según el portal The Philadelphia Inquirer, es posible que el tribunal emita un decisión sobre permitirle al presidente ejecutar su plan. Cabe destacar que la Administración de Seguridad y Salud Ocupacional de Estados Unidos (OSHA por sus siglas en inglés) anunció que no emitirá antes del 10 de enero citaciones relacionadas con su orden de vacunación obligatoria para que los patronos tengan tiempo de adaptarse.

La Casa Blanca dijo el mes pasado que «confía en la autoridad legal de ambas políticas».

La administración de Biden aseguró que estas nuevas órdenes podrían salvar la vida de 6,500 personas trabajadoras y prevenir 250,000 hospitalizaciones en los próximos seis meses, ya que el COVID-19 todavía representa un «grave peligro» para los empleados y empleadas.

Sin embargo, de acuerdo al medio, empresas, asociaciones comerciales y 27 estados dicen que la administración de Biden ha excedido su autoridad con el propósito de aumentar las tasas de vacunación y que muchos trabajadores siguen sin estar convencidos de los beneficios de las vacunas. Esto provocó que cuando OSHA anunció los mandatos a principios de noviembre, se presentara un recurso legal en la corte para desafiar la orden.

El 12 de noviembre, el tribunal de apelaciones de Nueva Orleans suspendió los mandatos, diciendo que eran «asombrosamente demasiado amplios». Agregó que plantearon problemas sobre el «poder virtualmente ilimitado del gobierno para controlar la conducta individual bajo la apariencia de una regulación en el lugar de trabajo».

Mientras tanto, los casos de mandato presentados en todo el país se consolidaron en el tribunal de apelaciones de Cincinnati. Un panel de jueces y juezas levantó la suspensión el 17 de diciembre.

"COVID ha seguido propagándose, mutando, matando y bloqueando el regreso seguro de los trabajadores estadounidenses a sus puestos de trabajo. Para proteger a los trabajadores, OSHA puede y debe poder responder a los peligros a medida que evolucionan", dijo el tribunal en su decisión.