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Por Valeria Alicea Guzmán

Para la persona que esté considerando presentar una petición de tutela, la principal recomendación que compartió la licenciada Carmen Selpa Báez es orientarse con una abogada. Indicó que, aunque puede realizarlo por derecho propio, es un proceso que tiene una serie de requisitos y una profesional del derecho los domina y puede asistirle. 

Sin embargo, pese a que este artículo no sustituye una asesoría legal, es importante que conozcas aspectos básicos de este proceso. 

¿Qué es la tutela? 

La abogada explicó que, según el Código Civil de Puerto Rico, la tutela confiere a una persona natural o jurídica la autoridad para representar y asistir a otra persona que, sin estar sujeta a la patria potestad, tiene restringida la capacidad de obrar por razón de su minoridad o por las causas que declara la ley. 

Ahora bien, ¿cuáles son las implicaciones de nombrar una persona tutora?

«La persona tutora] debe ejercer su cargo con diligencia y estará sujeta al Tribunal que la nombró tutora. Tendrá la obligación de rendir un informe anual al Tribunal de cómo administró el dinero del incapaz durante ese año. También tiene que pagar una fianza para garantizar el cumplimiento responsable de su gestión», compartió. 

Agregó que una vez que el foro judicial nombre a la persona como tutora, estará inscrita en el Registro de Tutelas del Tribunal.

«Es importante señalar que el cargo de tutor no es renunciable ni transferible, a menos que exista justa causa y así se demuestre». 

Con relación al proceso para nombrar una persona tutora, la licenciada destacó que la persona que solicite ser tutora debe presentar una petición juramentada en el Tribunal. Esta petición debe incluir los siguientes documentos: 

1. Certificado de antecedentes penales 
2. Certificación negativa de deuda del Departamento de Hacienda
3. Certificación negativa de la Corte de Quiebras. 
4. Evidencia de ingresos y gastos de la persona presunta incapaz
5. Otros documentos que evidencien que la persona está apta para administrar los bienes de la persona presunta incapaz

«Luego de presentada la petición, la ley requiere emplazar a todas las personas que tengan derecho a ser tutoras y al presunto incapaz. Entonces, el Tribunal señala una vista a la que debe comparecer un facultativo médico que testificará sobre la condición del presunto incapaz. También interviene en la vista un Procurador de Familia, quien velará por los intereses del presunto incapaz», aclaró. 

Tras presentar la prueba, Selpa Báez mencionó que el Tribunal emite la Resolución. En caso de aprobar la petición, el foro judicial declarará incapaz a la persona y le nombra la persona tutora, a quien le impone una fianza. «Los padres, abuelos y el cónyuge, están exentos de la prestación de fianza». 

¿Quiénes pueden ser tutores?,  preguntó Microjuirs.

– El Código Civil nos indica que puede ser cualquier persona natural que goce del ejercicio pleno de sus derechos. También puede ser tutor una persona jurídica, sin fines de lucro y que se dedique a la protección de menores o incapaces. Algunas de las prohibiciones para ser tutor son: si la persona fue privada de patria potestad, privada de una tutela anterior, está privada de su libertad o fue convicta por delito grave o menos grave que implique depravación moral. 

Responsabilidades de la tutela

Selpa Báez detalló que una persona tutora tiene la responsabilidad de representar al tutelado en todos los actos jurídicos que requieran su consentimiento, ejercer la tutela con diligencia y rendir cuentas. 

«Como mencioné anteriormente, el tutor debe rendir un informe anual en el Tribunal. Debe alimentar y educar al tutelado, según sea el caso y según haya dispuesto el Tribunal. Debe procurar por cuántos medios proporciona la fortuna del incapaz, que este adquiera su plena capacidad de obrar o la recobre, se rehabilite de la dependencia o trastorno emocional o físico que lo sujeta a la tutela y logre su mejor inserción en la sociedad. Debe someter al incapaz al tratamiento que requiera su condición de salud y dirigir a la persona que realizará el inventario y avalúo de los bienes. Al terminar el cargo debe rendir una cuenta final», resaltó.  

Ante las responsabilidades que debe cumplir una persona tutora, quizás te preguntarás cómo el tribunal le fiscaliza. 

La abogada de Familia explicó que el Tribunal le exige anualmente a la persona tutora, rendir un informe con los ingresos y gastos de la persona incapaz. Si no presenta el informe, contó que el Tribunal puede imponer sanciones o encontrar a la persona incurso en desacato. 

En caso de finalizar la tutela, sostuvo que el Tribunal examinará las cuentas finales y si encuentra que hubo alguna actuación impropia por parte del tutor notificará al ministerio público y al tutelado directamente o puede nombrar un defensor judicial o tutor interino. 

«Luego que el Tribunal aprueba la cuenta final, la envía al Registro de Tutelas para su inscripción y da por terminado el cargo», añadió. 

Sigue las recomendaciones 

Según Selpa Báez, un error común es que la persona que solicita ser tutor no esté al tanto de los ingresos y gastos del presunto incapaz. 

«Este es un fundamento para que el Tribunal declare sin lugar la petición ya que el tutor debe conocer todo lo relacionado al presunto incapaz y demostrar que puede administrar los bienes del mismo», expresó. 

De igual forma, la licenciada recomendó, a las personas que actualmente ejercen una tutela, llevar un récord sobre los ingresos y gastos del incapaz. «Por error o desconocimiento, muchas veces comienzan a realizar dicho récord cuando el Tribunal les concede un término final para rendir el informe anual».

Ojo. Para la abogada, uno de los mitos más comunes sobre la tutela es que la persona piensa que al ser tutora, continúa su cargo aún después de la muerte de la persona. Además, comentó que piensan que al poseer una Carta de Tutela no necesitan una declaratoria de herederos. «Sin embargo, una vez la persona fallece la tutela termina y el patrimonio se regirá por las leyes de las sucesiones». 

BONO: ¿Cuál es la diferencia entre la patria potestad y la tutela?

La licenciada dijo que la patria potestad es el conjunto de deberes y derechos que tienen los padres respecto a la persona y los bienes de sus hijos. 

«La diferencia fundamental es que la patria potestad solo se ejerce sobre una persona menor de edad. Una vez la persona adviene a la mayoría de edad hablamos de tutela en el caso del incapaz. Aunque es importante mencionar que el nuevo Código Civil incorporó la patria potestad prorrogada», manifestó.   

Asimismo, aseguró que muchas personas confunden la patria potestad con la custodia. «Creen que al tener a los menores bajo su custodia pueden tomar todas las decisiones sin informar o consultar al otro progenitor y ya vimos que la regla general es que la patria potestad se ejerce conjuntamente». 

A continuación, otros datos que la licenciada compartió y debes conocer sobre la patria potestad. 

• La regla general es que la patria potestad la ejercen ambos progenitores conjuntamente, en igualdad de derechos y responsabilidades. Esto es así a menos que exista un impedimento legal o que en el mejor bienestar del menor, el Tribunal disponga lo contrario. 
• Se puede renunciar a la patria potestad. Sin embargo, en ocasiones renuncian a ella para evitar el pago de una pensión alimentaria. El Tribunal Supremo, en el caso Chévere vs. Levis, resolvió que la obligación de prestar alimentos surge de la relación paterno-filial y queda establecida desde el momento en que se establece la paternidad o maternidad. Por lo tanto, la única manera en que dicha obligación cesa es si otra persona adopta al menor.