El Pro Bono de Servicios a la Comunidad Penal presentó durante la noche del lunes una actividad especial en la que confinados del Programa de Teatro Correccional presentaron la obra "Experiencias con mis amigos" en el Salón de Actos de la Escuela de Derecho de la Universidad de Puerto Rico.

La obra, que contó con la dirección de la reconocida actriz y directora Elia Enid Cadilla, fue aleccionadora para todos los presentes mostrando por una parte una historia que recoge las experiencias que llevan a hombres como los actores a ser encarcelados y a su vez, testimonio vivo de lo que es el poder rehabilitador del teatro.

La obra que presentaron relataba la historia de Chino, un joven de escuela superior, de padre y madre profesionales, cuya amistad con un vendedor y usuario de drogas culmina en su encarcelación. Las vívidas actuaciones de los confinados que encarnaron roles de mucha emotividad, conmovieron a todos los presentes, entre ellos al licenciado José Negrón, secretario de Corrección. Negrón se mostró orgulloso y complacido del trabajo de los confinados, que realizan este tipo de obras con mensajes de prevención y restauración en distintos lugares alrededor de la isla. Para Negrón fue importante mostrarle a la comunidad, en este caso a los estudiantes de Derecho, que en las prisiones también ocurren historias de éxito y rehabilitación y superación.

"Cuando hay agresiones o entra material de contrabando lo publican en todos lados. Uno de los granitos de arena que yo quiero aportar es dar a conocer estas historias. Todos los días hay confinados que van a la escuela, hay miles de confinados que todos los días salen de instituciones trabajar. Todos los días, hay confinados que tres a cuatro veces en semana llevan mensajes de prevención a escuelas", explicó emocionado el titular de Corrección.

Al final de la obra, los confinados tuvieron la oportunidad de tener un breve coloquio con estudiantes y profesores. Allí compartieron sus experiencias como actores en el Programa de Teatro Correccional dirigido por Cadilla, en el que la mayoría de ellos lleva participando por más de ocho años. Algunos relataron llevar condenas de 99 años y cómo el poder llevar mensajes de prevención por medio de las artes le había dado esperanza.

Según Cadilla, el trabajo que realizan los confinados cuenta para algunas bonificaciones o planes de desvío. No obstante, para ser parte del grupo deben contar con excelente comportamiento y estar en seguridad mínima. Algunos de los confinados que han salido a la libre comunidad, continúan colaborando con el grupo. Los confinados preparan su vestuario, escenografía así como la utilería que utilizan en sus obras.

La decana Vivian Neptune agradeció a los confinados por el privilegio de haber presenciado el trabajo que están realizando expresó deseos de colaborar con el programa para futuras presentaciones o proyectos.